Agustín Coto, legislador libertario de Tierra del Fuego, vivió una experiencia surrealista cuando fue acusado por un pasajero brasileño de estar relacionado con una bomba. Según el pasajero, Coto estaba viendo algo sospechoso en su celular, lo que lo llevó a alertar a la tripulación. El comandante tomó la decisión de evacuar el avión y activar los protocolos de seguridad. Personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria y la Fuerza Aérea trabajaron en el lugar para investigar el posible riesgo.
Finalmente, se descubrió que todo había sido una falsa alarma. El contenido que el pasajero brasileño interpretó como sospechoso resultó ser un videojuego llamado Monster Demolition, que Coto estaba jugando en su celular. A pesar del malentendido, el legislador fue demorado por las autoridades hasta que se esclareció la situación.
El vuelo, inicialmente programado para partir a las 16:00 horas, despegó a las 20:00 horas, y arribó a Buenos Aires cerca de las 23:10. El pasajero brasileño que había denunciado la supuesta amenaza no continuó el viaje.
Coto expresó su desconcierto por la situación en sus redes sociales, calificando lo vivido como “surrealista”. En tono irónico, mencionó que el videojuego que causó el malentendido era “muy recomendable”, pero que “no es recomendable viajar sentado al lado de un colifa brasileño”.
Este incidente ha generado revuelo en las redes sociales, donde muchos se solidarizaron con el legislador y cuestionaron la reacción exagerada del pasajero denunciante. Mientras tanto, tanto Polino como Barbieri continuaron compartiendo su experiencia, destacando el alivio de que todo terminó sin mayores consecuencias.