En la Ciudad de Buenos Aires, miles de personas realizan algún tipo de terapia semanalmente, pero la irrupción de esta app ha causado controversia. Valeria Sampedro presentó el informe de Telenoche preguntando: “¿Qué pasa si tenés que hacer terapia por una app con inteligencia artificial?”.
El informe explicó que Trenque Lauquen, en el oeste bonaerense, se convirtió en la sede de un polémico experimento. El gobierno local contrató la aplicación, permitiendo a los ciudadanos usarla gratuitamente durante tres días. Después de ese período, el gobierno de Trenque Lauquen, junto con la empresa creadora, Cux, pondría la aplicación a disposición de los usuarios de manera continua.
Sin embargo, ante los cuestionamientos de varios colegios de psicólogos, el municipio decidió cancelar el contrato. La aplicación, que respondía a los problemas y angustias de los usuarios a través de un bot, no logró renovar su contrato inicial de tres meses debido a la ola de críticas.
Para obtener una visión experta, entrevistaron a Gregorio Alcaín, médico psiquiatra, quien comentó: “Jamás el avance tecnológico es malo, siempre puede ser malo lo que uno hace con él. Pero considero que la relación médico-paciente es algo prácticamente imposible de cambiar. No quiere decir que una máquina no nos sirva para dar información o proveer otro enfoque, lo cual es favorable”.
Alcaín agregó: “Pero esta app no presenta papers médicos ni nada por el estilo. Interactúa como si fuera el psicólogo o el psiquiatra, y eso no es suficiente. Necesito un ser humano enfrente que comprenda mi alma, mi sentimiento, mi problema, mi angustia. Una máquina no puede contenerme de esa manera”.
La controversia alrededor de la aplicación de Connie Ansaldi destaca las tensiones entre la tecnología y la práctica tradicional de la terapia psicológica, abriendo un debate sobre el papel de la inteligencia artificial en la asistencia emocional.

