Un momento de tensión máxima se vivió este domingo a bordo del lujoso crucero Disney Dream, cuando una niña cayó al mar desde la cuarta cubierta. Sin pensarlo, su padre se lanzó al océano Atlántico para salvarla, protagonizando una escena que se volvió viral y fue celebrada por los pasajeros como un acto de “valentía pura”.

El crucero, operado por Disney Cruise Line, regresaba de un viaje de cuatro noches por las Bahamas rumbo a Fort Lauderdale, Florida, cuando se desató la emergencia. La alerta de “Mr. M.O.B.” (Man Overboard, o “hombre al agua”) sonó a bordo, activando los protocolos de rescate.
Según testigos, la menor cayó desde una zona con barandales de acrílico, diseñada para paseos. Sin dudarlo, su padre saltó tras ella al mar abierto. En ese momento, decenas de pasajeros corrieron a los balcones mientras el personal activaba el sistema de búsqueda.
“Una niña se cayó por la borda desde la cuarta cubierta y su padre saltó tras ella. Afortunadamente, el equipo de rescate de Disney actuó de inmediato y ambos fueron salvados”, escribió Kevin Futura, uno de los pasajeros, en Facebook.
Ambos permanecieron en el agua por unos 25 minutos, según relataron los testigos. El padre sostuvo a la niña todo el tiempo mientras esperaban la llegada de una lancha de rescate amarilla que finalmente los llevó de regreso al barco.
Su retorno fue recibido con aplausos, vítores y lágrimas. “Fue un momento angustiante, pero todos sentimos un enorme alivio al verlos regresar. Es algo que no olvidaré nunca”, publicó una pasajera en TikTok.
Disney confirma el rescate
En un comunicado oficial, Disney Cruise Line informó que “dos huéspedes fueron rescatados con éxito tras caer al mar”, y elogió la actuación del personal:
“Nuestros miembros de la tripulación respondieron con profesionalismo y rapidez, garantizando el regreso seguro de ambos en minutos. Este incidente destaca la eficacia de nuestros protocolos de seguridad”.
No se han revelado las identidades ni la edad de la niña, pero se confirmó que ambos se encuentran en buen estado y fueron atendidos a bordo tras el rescate.
El Disney Dream, una embarcación valorada en $900 millones de dólares, está equipado con sistemas de monitoreo que detectan caídas automáticas por la borda. Cámaras, sensores de movimiento y software especializado alertan inmediatamente a la tripulación, lo que facilitó una respuesta veloz.
Aunque se desconoce aún cómo ocurrió exactamente la caída, el incidente ha encendido el debate sobre la seguridad infantil en cruceros, especialmente en zonas elevadas donde, a pesar de las medidas, los riesgos persisten.
En redes sociales, el hombre fue calificado como un héroe. Usuarios en X (antes Twitter), Instagram y Facebook lo llamaron “el padre del año” y destacaron su impulso de proteger a su hija por encima de todo.
“Ese hombre hizo lo que cualquier padre haría, pero no todos tienen el valor. Lo arriesgó todo. Es un héroe real”, escribió un usuario en Facebook.
La compañía aún no ha confirmado si abrirá una investigación interna ni ha dado detalles sobre el estado de salud emocional de los involucrados. Por ahora, solo se sabe que el crucero retomó su itinerario sin más incidentes, con la historia de un rescate milagroso a cuestas.
El caso ha sido cubierto por medios internacionales no solo por el dramatismo del momento, sino por el desenlace positivo. En un mundo donde muchas historias similares terminan en tragedia, esta fue una excepción.