Esther Jeong, reconocida ceramista y creadora de contenido en TikTok, está atravesando uno de los momentos más difíciles de su vida. En marzo, durante un viaje a Corea del Sur, se sometió a un tratamiento de rejuvenecimiento facial con Juvelook Volume, un producto popular en el mundo de la estética. El procedimiento, que parecía sencillo, terminó con una consecuencia devastadora: la pérdida de visión en su ojo izquierdo.

Una artista visual afectada por un médico descubierto.
El impacto es doblemente trágico en el caso de Jeong. Como ceramista, su trabajo depende fuertemente de la percepción visual, los detalles, las texturas y la simetría. A esto se suma su presencia en redes sociales, donde comparte tanto sus obras como sus rutinas de cuidado facial y bienestar, contenidos que la han convertido en una figura influyente en el mundo de la belleza y el arte.
El tratamiento Juvelook, que promete mejorar la elasticidad y el volumen de la piel a través de la estimulación del colágeno, fue realizado en una clínica coreana. Según contó la propia Esther, durante la aplicación del producto comenzó a sentir una molestia aguda en el ojo izquierdo y se lo comunicó varias veces al médico. La respuesta que recibió fue que se trataba de un efecto temporal de la anestesia local.
Pocas horas después, su visión se deterioró por completo. Visitó seis hospitales y fue evaluada por especialistas de primer nivel, quienes finalmente diagnosticaron una oclusión de la arteria retiniana (BRAO) , una condición que bloquea el flujo sanguíneo a la retina y puede provocar ceguera permanente. Los médicos concluyeron que si se hubiera accionado en un margen de dos horas con el tratamiento adecuado, la lesión habría podido revertirse.
A pesar de intentarlo con terapias como la oxigenoterapia hiperbárica y la terapia de vacío, los resultados han sido infructuosos. El daño ya es irreversible.
El caso de Esther Jeong ha generado conmoción en redes sociales, especialmente entre comunidades de artistas y profesionales que trabajan con sus manos y sentidos. También ha encendido un debate sobre los riesgos reales de los procedimientos estéticos, incluso cuando se realizan en clínicas reputadas y con productos aprobados.
Aunque tratamientos como Juvelook, Sculptra o Juvederm son promocionados como seguros y no invasivos, la experiencia de Esther recuerda que ningún procedimiento estético está completamente exento de riesgos , y que la rapidez de respuesta médica ante complicaciones puede ser determinante.