En un desarrollo impactante, Lauren Pisciotta, ex asistente ejecutiva de Kanye West, ha ampliado su demanda contra el rapero, alegando no solo acoso sexual, sino también que él la drogó durante una sesión de estudio copresentada por Diddy. Esta serie de acusaciones ha sacudido la industria musical y ha puesto el foco sobre las conductas cuestionables de figuras prominentes en el entretenimiento.
La demanda inicial de Pisciotta, presentada en junio, detallaba mensajes sexuales inapropiados de West, pero ahora ha sido modificada para incluir nuevas afirmaciones sobre un incidente en el que ella se sintió desorientada tras consumir una bebida en la sesión de estudio. Según su relato, se les dijo a todos los asistentes que debían beber si deseaban permanecer en el evento.
Pisciotta afirma que, tras ingerir la bebida, comenzó a sentirse extraña y se despertó al día siguiente sin recordar casi nada de la noche anterior. Esto la dejó con sentimientos de vergüenza y confusión, especialmente cuando, años después, Kanye supuestamente le mencionó el encuentro, sugiriendo que habían tenido relaciones sexuales. Ella ha expresado su inquietud sobre la posibilidad de haber sido drogada durante la sesión.
Además, Lauren ha revelado que West le enviaba mensajes de texto muy gráficos, incluyendo comentarios sobre sus deseos sexuales, lo que intensifica la naturaleza perturbadora de las acusaciones. Por otro lado, Diddy, que se encuentra en el ojo del huracán por sus propias acusaciones de agresión sexual, no ha sido implicado directamente en las acusaciones de Pisciotta.
