El legendario actor Gene Hackman, ganador de dos premios Óscar, y su esposa, Betsy Arakawa, fueron encontrados muertos en su residencia de Santa Fe el miércoles 26 de febrero de 2025. Hackman tenía 95 años.

Según informó la Oficina del Sheriff del Condado de Santa Fe, las autoridades acudieron a la vivienda tras recibir una solicitud de verificación de bienestar alrededor de la 1:45 p. m. del miércoles. En el lugar, encontraron a Hackman y Arakawa sin vida, junto con su perro. La policía confirmó que no se sospecha de un crimen en su fallecimiento, pero se ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias.

“Los informes del médico forense con la causa final de la muerte generalmente tardan entre 4 y 6 semanas en generarse”, explicó Chris Ramírez, portavoz de la oficina del investigador médico de Nuevo México.

Un legado imborrable en el cine

Gene Hackman fue una de las figuras más icónicas de Hollywood, recordado por sus memorables interpretaciones en películas como The French Connection (1971), Superman (1978), Los imperdonables (1992) y The Royal Tenenbaums (2001). Hackman se retiró de la actuación en 2004 tras protagonizar Welcome to Mooseport, enfocándose en la escritura y la pintura.

Hackman ganó dos premios Óscar a lo largo de su carrera: el primero como Mejor Actor por The French Connection, donde interpretó al detective Popeye Doyle, y el segundo como Mejor Actor de Reparto por Los imperdonables, de Clint Eastwood. Su versatilidad le permitió encarnar personajes complejos, desde antihéroes hasta villanos memorables, como el carismático Lex Luthor en la saga de Superman de los años 70 y 80.

La noticia de su fallecimiento ha conmovido al mundo del cine y la televisión. El director Francis Ford Coppola, quien trabajó con Hackman en The Conversation (1974), declaró en redes sociales: “La pérdida de un gran artista siempre es motivo de duelo y celebración”.

Por su parte, el actor George Takei escribió en X (antes Twitter): “Gene Hackman podía interpretar a cualquiera y hacerte creer que había toda una vida detrás de cada personaje. Lo extrañaremos profundamente, pero su legado perdurará”.

Hackman llevó una vida discreta tras su retiro de la actuación. Residió en Santa Fe, Nuevo México, junto a su esposa Betsy Arakawa, una pianista clásica con quien se casó en 1991. A pesar de alejarse del ojo público, Hackman se mantuvo activo escribiendo novelas de ficción histórica y dedicándose a la pintura.

Gene Hackman deja un legado cinematográfico incomparable, una carrera repleta de interpretaciones inolvidables y el respeto de toda la industria. Su pérdida marca el fin de una era en el cine de Hollywood.

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