Según la denuncia presentada ante la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N° 22 de la Ciudad de Buenos Aires, la joven relató que conoció a El Dipy en un bar de la localidad de San Martín, Buenos Aires, en octubre de 2023, cuando él se encontraba trabajando como DJ. La denunciante señaló que previamente ambos se habían contactado a través de Instagram, donde intercambiaron números de teléfono y comenzaron a comunicarse vía WhatsApp. En ese contexto, la mujer aseguró que ambos militaban para el mismo partido político, La Libertad Avanza (LLA), lo que también habría servido como base para su relación inicial.

Esa noche, según la joven, El Dipy insistió en que consumieran drogas, aunque ella se negó. A pesar de su negativa, en un momento comenzó a sentirse mareada. La denunciante relató que decidió irse a su casa, pero en su lugar, El Dipy la convenció de acompañarlo a su departamento en el barrio porteño de Villa del Parque, donde posteriormente ambos mantuvieron relaciones sexuales. La mujer no recuerda con claridad los detalles de esa noche debido al estado de mareo en el que se encontraba, pero sí destacó que, en su opinión, el acto fue consentido.

Sin embargo, después de ese encuentro, la actitud de El Dipy comenzó a volverse más violenta y manipuladora. La joven relató que a partir de la victoria de Javier Milei en las elecciones de 2023, El Dipy comenzó a llamarla de manera insistente, incluso cuando ella decidía no atenderle las llamadas. En ese contexto, también le ofreció un trabajo, pero nunca cumplió su promesa.

De acuerdo con la denuncia, el músico aprovechó la falta de trabajo de la mujer para manipularla. La denunciante relató que en varias ocasiones El Dipy la presionó emocionalmente, diciéndole que si no aceptaba continuar viéndolo, perdería la oportunidad de acceder al supuesto puesto de trabajo que él le había prometido. La joven describió cómo El Dipy utilizó esa promesa como una forma de controlarla y obligarla a continuar la relación.

El relato de la denunciante continúa con una serie de episodios en los que El Dipy la agredió sexualmente. Según la joven, el primer abuso ocurrió en marzo de 2024, cuando El Dipy la citó nuevamente en su casa bajo el pretexto de hablar sobre novedades de trabajo. Sin embargo, ese encuentro terminó con un abuso sexual en el que El Dipy la agredió físicamente, sujetándola de las muñecas y diciéndole que no podría escapar. La joven también detalló otros dos episodios de abuso, el 17 de abril y el 16 de mayo de 2024, cuando nuevamente bajo la excusa del trabajo, la citó a su casa y la forzó a mantener relaciones sexuales.

Además, la denunciante indicó que, aunque se sentía atrapada, decidió guardar las conversaciones con El Dipy como prueba de la relación abusiva y manipuladora. Estas pruebas serán fundamentales en el proceso judicial que ahora se encuentra en curso.