El anuncio llegó a través de su canal de YouTube, donde publicó un video titulado “¡Actualización vencida!”, en el que mostró su anillo de bodas y dijo con una sonrisa: “Me casé”. La ceremonia fue pequeña e íntima, realizada en octubre de 2024 en el icónico puente Lover’s Leap en Connecticut, Estados Unidos, justo en el mes en que la pareja celebró su quinto aniversario.

En la grabación también apareció Lupita, su hermana siamesa, quien dejó en claro que no está interesada en casarse. “Soy asexual y a-romántica. No quiero casarme”, explicó.
La elección de vestuario también fue particular: Carmen llevó un vestido verde esmeralda, lejos del tradicional blanco. Daniel, su pareja, usó un traje oscuro con una pajarita verde a juego y un girasol en el ojal. La boda fue tan íntima que ni siquiera la anunciaron en redes hasta varios meses después.
Una historia de amor atípica, pero profundamente real: Carmen y Daniel se conocieron en 2020 a través de una app de citas. Según contó ella, la mayoría de los mensajes que recibía eran fetichistas, pero con Daniel fue diferente: “No me preguntó sobre mi condición, me trató como una persona más”.
Carmen y Lupita tienen 23 años, nacieron en México y crecieron en Estados Unidos. Comparten pelvis, hígado, aparato reproductivo y circulación sanguínea, pero cada una tiene su propio corazón y estómago. Controlan una pierna cada una y les tomó más de 17 años coordinarse para caminar.
En 2022, Carmen reveló que su relación con Daniel era más cercana a una “amistad profunda” que a una pareja tradicional, y que no había intimidad sexual. Aun así, el vínculo creció y se consolidó con el paso de los años, hasta llegar al “sí, quiero”.