Un trágico suceso ocurrió en Brasil cuando un adolescente de 14 años, Davi Nunes Moreira, murió tras haberse inyectado un líquido obtenido de una mariposa. El joven pasó siete días en agonía antes de su muerte, siendo ingresado en el hospital el 5 de febrero y falleciendo el 12 de febrero en el Hospital General de Vitória da Conquista, en Bahía.

Los síntomas comenzaron cuando el padre de Davi notó que su hijo caminaba rengueando, y al ser interrogado, el chico alegó que se había lastimado jugando. Sin embargo, la condición empeoró rápidamente. El adolescente sufrió una crisis de vómitos y fue ingresado en un hospital en Planalto, donde estuvo internado una semana antes de ser transferido al hospital de mayor complejidad en Vitória da Conquista.
Antes de morir, Davi le confesó a un profesional de la salud que había comprado una jeringa en una farmacia, aplastado una mariposa y extraído el líquido de su cuerpo para inyectárselo en la pierna. No especificó qué tipo de mariposa usó, pero su padre descubrió la jeringa debajo de su almohada después de su muerte.

El caso ha causado conmoción, y las autoridades brasileñas, a través de la Policía Civil, investigan las circunstancias y las posibles causas del fallecimiento, aguardando el informe pericial que determine si el líquido de la mariposa fue responsable de su muerte. Expertos advierten que manipular fluidos biológicos de insectos puede ser extremadamente peligroso, ya que muchas especies, como las mariposas, contienen sustancias tóxicas para defenderse de depredadores.